Por Cruz Pérez Cuéllar
Siempre que se habla de democracia en un país donde no hay más opciones que las contenidas en la “Ley de Herodes”, en el discurso bien pueden hablar de que hay de donde escoger, sobretodo si se habla de partidos políticos, aunque en realidad se entiende que dichas opciones son la misma cosa, entonces estamos hablando de una pluralidad simulada o falsa.
En nuestro país, específicamente en Chihuahua, podemos decir con seguridad que hay opciones con intenciones genuinas de marcar un rumbo diferente al bipartidismo, no todas por supuesto; aunque falta mucho por hacer en este terreno, ya que el sistema ha manipulado a los partidos menores (otros se han entregado sin el mínimo recato) y ha pervertido la forma de repartir espacios, de entregar prerrogativas, etcétera. Entonces también podemos decir aquí que estamos frente a una pseudodemocracia o una democracia inacabada.
Lo que resulta verdaderamente irónico para el PRI y el PAN, quienes crearon las condiciones del reparto de espacios a partidos políticos en los congresos locales, es que ellos mismos se vean imposibilitados para acceder a las diputaciones de Representación Proporcional y que las reglas que ellos hicieron y aceptaron antes de la contienda pasada, ahora les juegue una mala pasada, ese es el caso de ambos partidos en el estado.
En el caso del Revolucionario Institucional, a cargo de Guillermo Dowell, la repartición de las también llamadas diputaciones Plurinominales se conciben como una verdadera tragedia para la cúpula de ese partido, independientemente de las divisiones internas, de las autoimpugnaciones que ellos presentaron para ganar una posición u otra en la lista de beneficiados de ese partido.
A pesar de la cantidad de votos obtenida en la pasada elección, que en otra situación les granjearía de tres a cuatro diputados por esa vía, igual que al PAN le sucedía anteriormente, a pesar de todo no podrán acceder a ni una sola plurinominal, su negociación con los partidos pequeños, sus coaliciones, los dejaron en cueros y ahora sólo cuentan con cinco espacios en el Congreso Local, producto de los cinco triunfos por mayoría que obtuvieron el 5 de junio, ese es un buen golpe para un partido que está acostumbrado a ganar, que aun perdiendo ganaba, pero ahora recibe una dosis de su propio brebaje que le funcionó en otras circunstancias pero ahora le resultó tóxico hasta para el propio creador.
Gracias al PRI y su esquema de transferencia de votos le deben estar muy agradecidos el Partido Verde Ecologista de México, de donde resultaron beneficiados con la pluri Alejandro Gloria González y Hever Quezada; del Partido del Trabajo se benefició a Rubén Aguilar Gil y Héctor Vega Nevárez. El Partido Nueva Alianza peleó con uñas y dientes el espacio prometido a María Antonieta Mendoza, no dejaron que el PRI hiciera válido el chantaje de dejarles esa posición por la candidatura ofrecida a René Frías, exdirigente de la Sección 42, quien ganó por mayoría en el distrito que abarca Guerrero.
En lo que corresponde al Partido Acción Nacional. La tradición decía que quien amarraba la primera posición de la lista de candidatos a diputados plurinominales, automáticamente quedaba dentro de la siguiente legislatura. El presidente estatal en turno, si coincidían los tiempos, podía caer en la tentación de agenciarse esa primera posición, pese al reclamo posterior y al repudio de la militancia. En esta ocasión no ocurrió así, debido a circunstancias extraordinarias, a un fenómeno que pocas veces se da en la política pero que ya había sucedido en el plano nacional y de cierta forma a nivel local.
El presidente estatal del PAN, que ya está por salir, Mario Vázquez, cometió doble pecado en esta acción, se abalanzó sobre la primera posición de la lista de plurinominales sin importar la postura de los militantes, ya que él fungió como juez y parte de las contiendas internas, dejando a otros en el camino con mejores condiciones políticas. Pero además rompió con la promesa de campaña de no buscar un puesto público mientras fuera presidente del partido, mintió deliberadamente al panismo.
Pero el fenómeno político ocurrido en la elección impidió que Vázquez obtuviera la plurinominal al ganar el PAN 16 diputaciones de mayoría; las reglas electorales surtieron efecto en este caso para evitar la sobrerrepresentación. Una situación que jamás había sucedido como tal, lo cual dejó sin posibilidad al dirigente panista.
El panorama para Vázquez pinta difícil, porque por un lado sufrió una inesperada derrota individual pese al triunfo del partido en general; y por otro, tiene la puerta cerrada del gobernador electo, Javier Corral, que si acaso le concede un cargo en su gabinete será únicamente para cumplir con las formas, no tendrá preponderancia alguna su presencia ahí.
Además, su ingenuo discurso sobre las razones de la victoria pasada ni Corral ni los militantes lo creen. Él dice que fue gracias a las estrategias del Comité Estatal del PAN que se ganó la gubernatura y las diputaciones, cuando los propios panistas saben bien las condiciones de debilitamiento económico, de estructura, incluso anímico y de división que prevalece en el partido desde hace años.
A la luz de la razón, un servidor puede reconocer, aún con las notorias diferencias que tengo con el gobernador electo Javier Corral, que la victoria del PAN fue gracias a la empatía con la población que provocó su mensaje en campaña, que embonó a la perfección ante un PRI y sus representantes desgastados, en un contexto de inconformidad de la población que permitió el triunfo indiscutible de ese partido, y no una estrategia fantasma como la revelada por Mario Vázquez, ni mucho menos por una estructura fuerte que es inexistente, solamente basta con mirar cuantas casillas se quedaron sin representantes, a cuanta gente tuvieron que pagar para que acudieran en representación del PAN, etc.
EL PRD y MC se quedaron solo con una posición, en ambos casos parece que la distribución no fue justa con ellos, la trasferencia de votos, entre otras cosas intervinieron para que solamente se les diera un único espacio, pese a su real representación a comparación del PT o Partido Verde, por ejemplo, que tendrán dos curules. Pero también se puede interpretar que tuvieron una reacción legal desfasada, pretenden impugnar cuando podían haber presionado antes.
Los del Movimiento de Regeneración Nacional (MoReNa) actuaron a tiempo, también crecieron y pudieron hacerse de dos espacios, eso es mucho para un partido que participa por primera vez en una elección estatal en Chihuahua. Así se acomodaron las cosas finalmente, quien tuvo más saliva tragó más pinole y quien crió cuervos le sacaron los ojos.
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