Provocación, el camino de la desesperación

Avatar RegistroPor Cruz Pérez Cuéllar

El nuevo rostro político que seguramente adoptará nuestro país a partir del 2018 tendrá un anticipo el próximo 4 de junio, con las elecciones del Estado de México, donde por primera vez en su historia se disputan el gobierno tres cartas fuertes, una de ellas venida del partido enquistado en el poder, que representa el priista Alfredo del Mazo Maza, quien cuenta con la bendición del exgobernador de ese lugar y que ahora es presidente del país, Enrique Peña Nieto; la segunda, es Josefina Vázquez Mota, la candidata derrotada en la elección presidencial del 2012, y enviada al tercer lugar. En la disputa se encuentra la maestra Delfina Gómez Álvarez, de Movimiento de Regeneración Nacional, quien es apoyada por el dirigente nacional de Morena, Andrés Manuel López Obrador.

Esta situación de entrada rompe con el bipartidismo manifestado desde siempre en el Estado de México, donde sólo el PAN y el PRI se han disputado la gubernatura, el segundo en mención por lo regular salía ganando las elecciones con algunas excepciones, el PAN era el único partido que lograba hacer la alternancia. Ahora, la cosa ha cambiado, pues la maestra Delfina, venida de mero abajo ha colocado a los representantes de la genuina partidocracia mexicana en aprietos, y ahora ella es puntera en sectores que en antaño se pintaban solamente de azul o de tricolor, en estos momentos ondean primordialmente la bandera de Morena.

La razón es simple, Vázquez Mota no ha podido comprobar la aplicación de los casi 1 mil millones de pesos que habría recibido del gobierno de la República para una asociación civil que ella encabeza y que supuestamente fue constituida para ayudar a los migrantes mexicanos. En su momento hablamos en este mismo espacio (Artículo titulado “¿Vázquez Mota y Peña Nieto; juntos pueden?”, publicado por El Heraldo de Chihuahua el 16 de octubre de 2016) de dicho arreglo entre el presidente Enrique Peña Nieto y su oponente en la elección presidencial, con quien habría hecho alguna componenda de este tipo en tiempos de la campaña, para cerrarle el paso a Andrés Manuel, quien amenazaba con ganar la elección. Esos señalamientos tienen bocabajeada a la candidata panista quien nuevamente podría quedar en tercer lugar en la elección, en donde tuvo momentos, de acuerdo a varias encuestas, en los que encabezaba las preferencias.

En el caso de Alfredo del Mazo, la ambición de poder, las corruptelas de siempre del prehistórico PRI, la ayuda descarada del gobierno federal, están siendo observadas por el electorado mexiquense que lo ha mandado a un segundo y tercer lugar en las últimas encuestas realizadas por diversas empresas, lo cual pone nervioso a su principal patrocinador que opera desde Los Pinos y que en días pasados hizo que parte de su gabinete hiciera el ridículo con tal de sumarle algunos votos a su candidato, puesto que se pudo observar en una semana al secretario de salud, José Narro Robles, inscribiendo personalmente en Edomex a ciudadanos al Seguro Popular; a Rosario Robles, de la Sedatu, entregando apoyos y escrituras; al secretario de gobernación Miguel Ángel Osorio Chong, entregando actas de nacimiento y cosas parecidas; la idea de perder su propio estado ha hecho que Peña Nieto tome medidas desesperadas, a tal punto de romper con las formas.

Tres meses faltan solamente para la elección del Estado de México y su resultado será el síntoma de lo que sucederá con las elecciones del próximo año, donde de entrada se puede adelantar que el PRI y el PAN no irán solos, el seguro candidato de Morena, López Obrador, se perfila como la principal carta y obtenga o no el triunfo en Edomex, la cantidad de votos que logre la candidata de Morena demostrará la gran posibilidad de triunfo para AMLO en 2018 y con ello el cambio que en todo el país se necesita.

En la segunda parte de esta colaboración, quiero referirme a otra medida desesperada del gobierno de Enrique Peña Nieto por desacreditar la figura de López Obrador al tratar de confrontarlo con las fuerzas armadas de México, por una declaración que hiciera días atrás sobre las masacres ordenadas por el actual presidente de la república y su antecesor Felipe Calderón Hinojosa, a quienes les adjudica una equivocada estrategia de seguridad nacional que ha dejado, desde que Calderón inició con su estúpida guerra contra el narco, 201 mil asesinatos. Del panista habló que ordenó al menos una centena de ataques del ejército que terminaron en masacre con múltiples muertos cada uno.

En todo el territorio nacional se pueden recopilar anécdotas sangrientas por excesos cometidos por el Ejército, no por decisión propia sino por orden de su jefe supremo, que es el presidente y que iniciaron formalmente en el sexenio de Calderón y continúan en el presente.

Las expresiones anteriores trajeron como consecuencia una serie de declaraciones encabezadas por el encargado de la política interior, Miguel Ángel Osorio Chong y por el propio presidente Enrique Peña, quienes han tratado de manipular el tema y de confrontar al Ejército con el dirigente nacional de Morena, sin embargo está consciente de que el Ejército se compone por hombres y mujeres de gran valía, que incluso votaron por él en las pasadas elecciones y que de los errores cometidos no se les puede acusar a ellos sino a quienes los dirigen.

Llama la atención el cambio de estrategia anunciado por AMLO en el tema de la seguridad que adoptará el país en caso de ganar las elecciones en el 2018, así como la mejora en las percepciones salariales de los soldados adscritos a cualquier regimiento terrestre, a los de la Marina, Fuerza Aérea, de la misma manera que ha prometido a los maestros, médicos y enfermeras que prestan servicios al estado, y que requieren de mejorar su condición de vida para que al igualmente mejoren sus servicios.    

Parece que de aquí en delante esa puede ser la estrategia de quienes se siguen oponiendo al cambio, sin embargo, la muestra de Edomex dejará más que una historia para el anecdotario, será la antesala de lo que viene el próximo año, y donde se advierte una madurez democrática en el ciudadano que antes podía engañarse con algunas promesas falsas o arengas estrepitosas de los políticos oradores de siempre que convencían con la palabra pero nunca, nunca con el ejemplo.

México ya está listo para el cambio, solo falta que lleguen los tiempos, mientras tanto que persevere la esperanza  y la unidad que requiere nuestro pueblo.

Sugerencias y comentarios favor de hacérmelos llegar a mi correo: cruzp@terra.com.mx